El agustino recoleto Enrique Gómez habló sobre Santo Tomás de Villanueva y su doctrina sobre la pobreza y la caridad en la primera conferencia del congreso en la Universidad Católica de Valencia
El congreso ‘Santo Tomás de Villanueva, postulado como doctor de la Iglesia’ comenzó este martes en la Universidad Católica de Valencia (UCV) con la ponencia del agustino recoleto Enrique Gómez, quien trató la doctrina del santo agustino en torno a la pobreza.
Con el título ‘Padre de los pobres’, analizó detalladamente desde el punto de vista teológico su pobreza y sus acciones con los pobres, uno de las claves de la doctrina de Santo Tomás de Villanueva.
Enrique Gómez comenzó su exposición afirmando que “Santo Tomás era un hombre tremendamente humano y sensible”, un aspecto heredado: “Le viene de familia; sus padres se caracterizaban por fijarse en los necesitados”, indicó.
El agustino recoleto continuó diferenciando los pobres de los que Tomás de Villanueva hablaba: “Los pobres de necesidad, por voluntad y los pobres de espíritu”. Todos, indicó, compartían las mismas características. “Todos los pobres son para él vulnerables”, dijo.
Posteriormente, Gómez analizó la posible implicación política que puede tener la acción de Santo Tomás de Villanueva con los pobres. “Santo Tomás de Villanueva defiende que si a los pobres les falta algo es porque los que tienen les roban”, explicó. Esto es lo que el obispo agustino llamará “sociedad de apropiación”.
Santo Tomás también hablaría de la justicia como acción de “dar a los pobres y no como acto de caridad”, como indicó Enrique Gómez, quien fue más allá: “La avaricia será para él un homicidio porque mata a los pobres”. “Santo Tomás de Villanueva llama hospedería de los pobres al mundo en el que vive”, resumió.
De esta forma, Enrique Gómez expuso la doctrina social afirmando que puede ser un anticipo de lo que hoy se conoce como doctrina social de Iglesia. A sus fieles, Santo Tomás de Villanueva “presenta un Cristo pobre para los pobres”.
Por último, Enrique Gómez concluyó hablando de la “situación de extrema urgencia y gravedad” de los pobres que preocupan a Santo Tomás. Las causas de que se ignore a los que no tienen nada es que “no son rentables, molestan y desagradan a la vista”, lo que hace que el santo agustino lo entrega todo a los necesitados, “muriendo en un camastro que no es suyo”.