Son varios los motivos para recordar justamente hoy a monseñor José Agustín Ganuza García, obispo jubilado de la prelatura de Bocas del Toro, en Panamá. Varias las coincidencias, entre las cuales los 60 años de su profesión solemne y sus cuatro décadas como obispo.
Aunque su primera profesión religiosa como agustino recoleto la hizo en 1947, su compromiso de por vida lo ratificó el día 27 de septiembre de 1952. Casi 20 años más tarde, tal día como hoy, un 27 de mayo de 1972, fue ordenado obispo prelado de Bocas del Toro, sucediendo al también agustino recoleto monseñor Martín Legarra.
Homenaje por su pastoral indígena
Como es preceptivo, al cumplir 75 años Ganuza presentó su renuncia al Santo Padre que, hace poco más de cuatro años, el 1 de mayo de 2008, le nombró sucesor en la persona de otro agustino recoleto, Aníbal Saldaña Santamaría. Y ha sido de monseñor Saldaña de quien ha partido la iniciativa de rendir homenaje a su antecesor por los 36 años que pastoreó a la Iglesia de Bocas del Toro; y especialmente por su labor entre los indígenas.
Ha aprovechado para ello que se cumplían los 25 años de la Conapi (Coordinadora Nacional de Pastoral Indígena). Este organismo, que aglutina a los representantes de los grupos indígenas de Panamá, se creó en 1987 como reacción, entre otras cosas, a un proyecto de minería a cielo abierto que ponía en peligro el equilibrio ecológico en la Comarca Ngäbe-Buglé, al norte del país.
Las líneas maestras de su compromiso eran claras: apoyar la luha de estos pueblos por su tierra; apoyar las organizaciones autóctonas; defender los recursos naturales; promover la creación de una Iglesia autóctona; denunciar casos concretos de explotación y opresión…
El libro que lo recuerda
Sobre la Conapi y sus 25 años, a instancias de monseñor Saldaña, acaba de publicar un librito el jesuita Jorge Sarsaneda del Cid, que ha trabajado intensamente entre los pueblos indígenas, tanto en Panamá como en Guatemala.
“¿Qué tiene que ver –se pregunta Sarsaneda en el libro– el obispo Ganuza con la Coordinadora Nacional de Pastoral Indígena y sus 25 años”. Y, a renglón seguido, se responde: “Pues, sencillamente, que sin él no hubiera sido posible este rico caminar de servicio y acompañamiento. Por supuesto que los misioneros, misioneras y catequistas han sido la parte fundamental de este camino, pero él fue el motor durante más de treinta años”.
El próximo día de San Agustín (28 de agosto), monseñor José Agustín Ganuza cumplirá 81 años. Aunque español de nacimiento, es panameño de corazón y sigue residiendo en Panamá, en la capital. Durante muchos años, en ocasiones solemnes, ha lucido la chaquira o esclavina de abalorios que representa la autoridad entre los indígenas. Ésa, la de la autoridad moral, es la imagen que ha dejado entre sus antiguos fieles diocesanos.