Actualidad | Destacados portada

Ejercicios espirituales agustinianos en Río de Janeiro

Del 2 al 7 de enero se tuvieron en el Sitio Santo Agostinho (Río de Janeiro, Brasil) los ejercicios espirituales agustinianos. Para dirigir los ejercicios espirituales fue invitado Fr. Enrique A. Eguiarte. El tema de los ejercicios fue el correspondiente al año 2017, “Queremos ver a Jesús”, en el que se aborda la persona de Jesús a través de los siete “Yo soy” que nos ofrece el evangelio según san Juan. De este modo las reflexiones de los ejercicios se basan tanto en el texto del evangelio, como en el comentario de san Agustín sobre el mismo evangelio, así como en la doctrina de la iglesia y las Constituciones de la Orden.

Como es bien sabido, estos ejercicios agustinianos se hacen en absoluto silencio, e incluyen espacios para realizar la lectio divina, -en este caso sobre diferentes textos del evangelio según san Juan-, la adoración del santísimo, el rezo del rosario y el rezo de la liturgia de las horas de manera pausada y tranquila.

De este modo, el primer día estuvo dedicado a describir lo que la expresión “Yo soy” significa en el contexto bíblico y en el pensamiento de san Agustín, quien nos invita a acercarnos a Jesús, no solo como el Hijo de Dios, sino como el Dios encarnado, el Dios humilde y el Dios crucificado por amor para salvar a los hombres. Las reflexiones del primer día también giraron en torno a uno de los siete “Yo soy” que nos presente el evangelio según san Juan, concretamente al “Yo soy el camino la verdad y la Vida” (Jn 14, 6). El segundo día de ejercicios estuvo dedicado desde la mañana a trabajar la lectio divina de “Yo soy el Pan de vida” (Jn 6, 35), junto con otro “Yo soy” paralelo: “Yo soy la resurrección y la vida” (Jn 11, 25). Durante las reflexiones se puso de manifiesto la importancia de la eucaristía, así como de la centralidad de la comunidad en el pensamiento agustiniano en torno a la eucaristía.

El tercer día estuvo enfocado en el tema “Yo soy la luz del mundo”, señalando la importancia de la fe y de poder ver las cosas con los ojos del corazón, pues como señala san Agustín, no hay mayor desgracia que tener ciegos los ojos del corazón (en. Ps. 68, 2, 10). El cuarto día, como es costumbre en los ejercicios espirituales agustinianos, fue el día de la cruz, el día penitencial. Después de la oración de laudes y del oficio de lectura, se colocó solemnemente en la capilla la cruz, y Fr. Eguiarte hizo la exhortación a los presentes a considerar el misterio redentor de Cristo y a hacer a lo largo del día, un buen examen de conciencia. El tema que se abordó ese día fue el de “Yo soy el buen pastor” (Jn 10, 11), así como el otro “Yo soy” paralelo que nos ofrece el mismo capítulo diez del evangelio según san Juan: “Yo soy la puerta d las ovejas” (Jn 10, 9). Por la tarde, después de la charla, se tuvo la liturgia penitencial iluminada por los siete “Yo soy” que nos ofrece el evangelio según san Juan. Dentro de la liturgia penitencial, quienes así lo desearon, pudieron acercarse al sacramento de la reconciliación.

Finalmente el quinto día estuvo iluminado con la reflexión del tema “Yo soy la vid verdadera” (Jn 15, 1), junto con la importancia que san Agustín da a la gracia, particularmente en su polémica con los pelagianos.

A los ejercicios asistieron veinticinco religiosos venidos de las diversas comunidades que la provincia de Santo Tomás tiene en Brasil, como son, entre otras, Río de Janeiro, Sao Paulo, Belém do Pará, Paraguaçu Paulista, Portel, Salvaterra y Breves.

Durante los días de los ejercicios los asistentes pudieron meditar disfrutando del excelente clima y de los hermosos paisajes del Sitio Santo Agostinho.

Estos ejercicios fueron la primera tanda del año 2017, con la que se estrena el tema de este año, pudiendo experimentar los presentes la riqueza de las reflexiones bíblicas y agustinianas.

Fr. Eguiarte una vez terminados los ejercicios, regresó a Roma para viajar posteriormente a Monteagudo, donde impartirá un curso a los novicios sobre el monacato agustiniano.

 

X