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Retiro de cuaresma de la Capellanía china de Madrid en la parroquia Santa Rita

Los católicos chinos de la Capellanía China en Madrid se les ofrece la oportunidad de tener cada año un retiro de Cuaresma y otro en tiempo de adviento. Ordinariamente lo realizan en la Parroquia Santa Rita de Madrid. Este año el retiro estuvo dirigido por Francisca Yan, misionera agustina recoleta, que apoya de forma habitual en las actividades pastorales de la Capellanía.

Todos los años son dos citas obligadas las de los retiros de Adviento y Cuaresma que se desarrollan en la Parroquia Santa Rita. Para estos retiros acuden católicos chinos tanto de la Parroquia de Nuestra Señora de la Soledad subsede de la capellanía como de la misma Parroquia Santa Rita, sede principal de la Capellanía. El retiro, además de su finalidad espiritual, les sirve a los participantes como punto de encuentro y convivencia.

El retiro dio comienzo a las 10 de la mañana. Después de la acogida de los participantes y el ensayo de cantos, Francisca Ma dedicó una hora para presentar la lectio divina. La mañana se cerró con la práctica de la lectio divina en la cripta de la Parroquia, bajo la guía de Francisca y Juana Chen, una laica china muy comprometida.

El almuerzo tuvo lugar en el salón de la Parroquia en un clima de silencio mientras se escuchaba música instrumental.

Por la tarde, a las 15.00 horas, todos los participantes se reunieron de nuevo en el salón de la parroquia para asistir a una subasta de unos recuerdos valiosos. El acto lo moderó el actual capellán Guillermo Zhang, agustino recoleto, que para comenzar leyó el texto evangélico de Mateo 13, 44-46. A continuación, el mismo Guillermo ofreció una charla sobre el matrimonio a la luz de la palabra de Dios.

A las 17.00 horas comenzó un acto penitencial comunitario, teniendo todos la oportunidad de recibir el sacramento de la reconciliación al contar con los confesores Manuel Piérola, Juan Yang, José Guo, Guillermo Zhang (agustinos recoletos los cuatro) y el sacerdote diocesano Pedro Liu.

 La celebración eucarística estuvo armonizada por el coro de la comunidad china, que canta sus propias canciones chinas con fervor.

 

(www.agustinosrecoletos.org)

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