La familia agustino recoleta y agustiniana celebró en el Monasterio de Encarnación de Madrid (España) la declaración de las virtudes heroicas de la Madre Mariana de San José, fundadora de las Monjas Agustinas Recoletas. La Eucaristía de acción de gracias mostró el fervor que se mantiene vigente a la Venerable
El testimonio de vida de la Madre Mariana de San José, fundadora de las Monjas Agustinas Recoletas, sigue siendo actual, pese a que el reconocimiento de sus virtudes heroicas haya llegado 380 años después de su muerte. La efeméride de su fallecimiento -este domingo, 15 de abril- coincidió con la celebración de su declaración como Venerable y reconocimiento de sus virtudes heroicas. Fue en el Real Monasterio de la Encarnación de Madrid (España), donde descansan sus restos y recibe veneración de decenas de fieles.
Muchos de estos fieles abarrotaron la pequeña iglesia del monasterio madrileño para la jornada que organizó la Federación de Monjas Agustinas Recoletas de España y en la que participaron religiosos y miembros de la familia agustino recoleta -Orden de Agustinos Recoletos, Fraternidad Seglar Agustino Recoleta y Misioneras Agustinas Recoletas, entre otros-, así como de la familia agustiniana. Acudieron numerosas monjas agustinas recoletas contemplativas de otros conventos, que salieron de su clausura para acudir a esta gran celebración.
Fue una oportunidad para mostrar la devoción de muchos feligreses a la Madre Mariana de San José en una celebración solemne. Se abrió y pudieron pasar por delante de su tumba los asistentes, que veneraron los restos de la proclamada Venerable.
El obispo agustino recoleto de Tarazona (España), Mons. Eusebio Hernández, fue el encargado de presidir la Eucaristía de acción de gracias por el reconocimiento de las virtudes heroicas de la Madre Mariana de San José que el Papa Francisco promulgó en diciembre de 2017. Recalcó Hernández el testimonio de santidad de la vida de la fundadora de los primeros conventos de clausura agustinianos siguiendo el carisma de la Recolección.
«La Madre Mariana de San José siguen siendo un faro iluminador de vida entregada al Señor», dijo en su predicación el obispo, quien estuvo acompañado del obispo agustino recoleto de Casanare (Colombia), Mons. Javier Pizarro, y el Prior general de la Orden de Agustinos Recoletos, Miguel Miró. «Es uno de los personajes principales de la Recolección femenina y contemplativa -afirmó Hernández-, y modelo para todos los que quieren vivir el espíritu recoleto».
El agustino recoleto resaltó la «intensidad de su experiencia mística y la altura espiritual de sus escritos», pese a haber tenido responsabilidades en la congregación durante toda su vida. Por todo ello, Mons. Eusebio Hernández pidió que la Madre Mariana «siga iluminando e impulsando la verdadera Recolección».
Tuvo lugar durante la Eucaristía la lectura del decreto sobre las virtudes de la Venerable agustina recoleta. Asimismo, finalizando la celebración, la Hna. Eva María Oíz, presidenta federal de las Monjas Agustinas Recoletas de España, agradeció la asistencia de todos los presentes y de las personas -religiosos y laicos- vinculadas con el proceso de canonización de la Madre Mariana. «Nos atrevemos a pedir que intensifiquemos nuestra oración por la intercesión de la Venerable Madre Mariana, para que el Señor conceda los milagros correspondientes y podamos gozar un día con su beatificación y canonización, para mayor gloria de Dios, servicio de la Iglesia y para el bien del mundo», concluyó.
Previamente, el postulador de la causa de canonización ante la Santa Sede, el agustino recoleto Sansom Silloríquez, había explicado en una ponencia las etapas que componen el proceso que llevaría a la Madre Mariana de San José a los altares y cómo ha avanzado éste desde el fallecimiento de la Venerable en 1638 hasta la declaración de sus virtudes heroicas hace unos meses.