La Fraternidad Seglar Agustino Recoleta cuenta desde el pasado viernes con 16 nuevos miembros. En Granada realizaron sus promesas formando una nueva comunidad tras años viviendo juntos la fe. Durante este tiempo se han preparado y han experimentado la llamada de Dios en sus vidas
La llamada de Dios no es, en la mayoría de los casos, algo repentino. Se va gestando progresivamente, con el paso del tiempo y el acercamiento cada vez mayor a Dios. Esto ha sido lo que han experimentado en primera persona los 16 padres y madres de Granada que el pasado viernes realizaron sus promesas como nuevos miembros de la Fraternidad Seglar Agustino Recoleta. Juntos formarán la comunidad ‘Meridio’, en la que vivirán unidos la fe.
La historia comenzó hace seis años. Cerca de 30 personas, relacionadas en su mayoría con el Colegio Santo Tomás de Villanueva, empezaron a juntarse en un grupo de fe. Escuchaban la Palabra de Dios, reflexionaban y dialogaban sobre esta. De aquellos, la mitad ha firmado sus promesas de seguir a Cristo como fraternos agustinos recoletos en la Parroquia Santo Tomás de Villanueva, con la presencia del Prior provincial Miguel Ángel Hernández. El Superior de la Provincia Santo Tomás de Villanueva les recordó que su compromiso no es «por un grupo de amigos» sino «por la vocación a la que habéis sido llamados en vuestro trabajo y vuestra familia».
«La comunidad es un lugar de descanso». Para José Antonio, que ha formado parte de la comunidad desde sus inicios, acudir a ‘Meridio’ es una necesidad cada semana. «Es aquello que necesito, que semana a semana busco y que cuando no podemos reunirnos lo echo en falta».
«Siguiendo los pasos de San Agustín, es caminar al Señor juntos, en una sola alma y un solo corazón». Es la definición que encuentra Luis a la nueva comunidad que forma junto a su esposa y otros 14 ‘hermanos’. «Éramos un grupo de amigos, y nos dimos cuenta de que juntos era más fácil, más sencillo porque se caminaba mejor y a buen ritmo y aprendías: a conocerte y a quererte», recuerda.
Para Bárbara, su deseo es el de «compartir la fe» y «formar parte de la familia agustino recoleta». La mayoría de esta familia le acompañó el pasado viernes en la celebración. Un elevado número de miembros de la Fraternidad Seglar Agustino Recoleta de Granada, Monachil y Madrid estuvo junto a los nuevos fraternos. Sobre esto mismo incidió durante su homilía Miguel Ángel Hernández: «¿No hay vocaciones? Aquí están las vocaciones».
La celebración del pasado viernes, emotiva y sincera, tiene para Carmen una definición clara: «Quiero que todo el mundo sepa lo que vivimos por dentro, que es algo muy bonito: compartir la fe, y hacerlo con el carisma agustiniano». «Se trata de compartir con tus hermanos esas cosas tan bonitas que sientes».