Los Agustinos Recoletos celebran su 430 aniversario inmersos en el proceso de revitalización de su carisma y reestructuración de su organización, pasando de ocho a cuatro provincias. Como en sus inicios, los religiosos agustinos recoletos siguen deseando vivir su carisma de forma intensa
El 5 de diciembre de 1588 comenzaba en Toledo el histórico capítulo de la Provincia de Castilla de la Orden de San Agustín. Meses atrás, un nutrido grupo de religiosos agustinos había sentido la inquietud de vivir el carisma agustiniano de una forma más intensa. Deseaban vivir su vocación con más autenticidad y radicalidad, desde la interioridad y una mayor cercanía a los pobres y necesitados. El capítulo agustino delegó en Fray Luis de León para la creación de las reglas propias de estos religiosos, que comenzarían a llamarse Recoletos y cuyo renovado carisma comenzó pronto a expandirse por Sudamérica y Asia.
Como entonces, la Orden de Agustinos Recoletos celebra su 430 aniversario inmersa en el proceso de revitalización de su carisma y reestructuración de su organización. Llamados por el Espíritu Santo, los religiosos agustinos recoletos entendieron en 2010 y ratificaron en 2016 que era necesaria una renovación del ser agustino recoletos y una reorganización de su estructura, con el objetivo de no perder su identidad y seguir viviendo, como en sus inicios, el carisma surgido de la Recolección agustiniana de 1588.
Así, en 2010 comenzó a gestarse un proceso que tomó forma definitivamente en el Capítulo general de 2016 celebrado en Roma. ¿Por qué era necesaria una revitalización? El Proyecto de Vida y Misión de los Agustinos Recoletos tiene la respuesta: “Para lograr una auténtica vivencia agustino recoleta, impulsar la vida fraterna en comunidad, realizar la misión que la Iglesia nos encomienda y estar donde seamos más necesarios”. Como mencionó el Prior general, Miguel Miró, este proceso “nos ofrece nuevas posibilidades, pero no es el objetivo final; es el comienzo de una nueva etapa, exigente y esperanzadora, en la que habrá que establecer prioridades y estar abiertos a nuevas iniciativas para reavivar el carisma y la misión de la Orden”.
Entendieron los religiosos agustinos recoletos que, 430 años después, continúan siendo profetas del mundo actual, evangelizadores de la sociedad a través de la forma de vida de San Agustín. Por ello, era necesario construir comunidades fraternas e interiores, capaces de ser “creadores de comunión” en su vida cotidiana, en el estudio y en la labor pastoral con el pueblo.
De ocho a cuatro provincias
Fruto de este proceso de revitalización, los agustinos recoletos –cerca de 1.000 en todo el mundo– pasaron de organizarse de ocho a cuatro provincias. La histórica Provincia San Nicolás de Tolentino quedó unida con la de San Agustín; la de Santo Tomás de Villanueva a la de Santa Rita y San José, y la Provincia Nuestra Señora de la Candelaria con la de Nuestra Señora de la Consolación. Así, la Orden celebra en 2018 un nuevo aniversario de la Recolección con cuatro renovadas provincias: San Nicolás de Tolentino, Santo Tomás de Villanueva, Nuestra Señora de la Candelaria y San Ezequiel Moreno.
Aunque con menos religiosos, los Agustinos Recoletos tienen una meta clara: ser más fieles a la llamada que les hace el Señor. Para ello, este proceso no se refiere solo a una cuestión organizativa sino también interior de cada fraile agustino recoleto y de la forma de evangelizar de la Orden. Es por eso que esta revitalización ha renovado el Itinerario Formativo Agustino Recoleto (IFAR), el Itinerario Vocacional Agustino Recoleto (IVAR), así como impulsado la vida comunitaria y de oración.
Renovación de la misión en el mundo
La misión sigue siendo un pilar básico del carisma agustino recoleto. Cuba e Indonesia han sido los dos nuevos países a los que la Recolección agustiniana llegó en 2018. El objetivo es continuar consolidando y expandiendo el carisma, evangelizando a través de la Palabra de Dios y las enseñanzas de San Agustín.
La revitalización del carisma incluye también la labor solidaria y educativa de la Orden de Agustinos Recoletos. Desde hace un año, con la idea de trabajar más unidos y fortalecidos, la familia agustino recoleta se unió en red para trabajar por la solidaridad y la educación a través de ARCORES –Red Solidaria Internacional Agustino Recoleta– y EDUCAR –Red Educativa Internacional Agustino Recoleta–.
Como en 1588, la Orden de Agustinos Recoletos atraviesa un proceso esperanzador, ungidos por el Espíritu Santo, para seguir llevando a cabo su misión en la Iglesia.