Cinco obispos agustinos recoletos participan desde el 6 de octubre en el Sínodo de la Amazonia que el Papa Francisco ha convocado para buscar nuevos caminos en la evangelización en la extensa región amazónica. Los prelados -tres procedentes de Brasil, uno de Perú y otro de Colombia- ofrecen distintas visiones de la misión de la Iglesia en estos territorios y las soluciones que se deben buscar para atajar los problemas que surgen en estos lugares.
«El papel de los laicos es insustituible»
El obispo agustino recoleto de Lábrea, Mons. Santiago Sánchez, explica su visión del Sínodo de la Amazonia: «No queremos una Iglesia distinta, solo llevar la Palabra de Dios a un lugar donde no puedes acomodar muchos esquemas». En este sentido, indica que «con todas las burocracias», a veces se desvirtúa la Iglesia y «nos quedamos antes en la letra y en las leyes que en la propia vivencia del Evangelio».
Uno de los aspectos que más se discute en este Sínodo es el papel que deben tomar los laicos en la evangelización. El obispo de Lábrea afirma que «el sacerdote ya no es el protagonista» y que «el papel de los laicos es insustituible». «Ellos tienen que evangelizarse a ellos mismos», asegura.
«En el Sínodo todas las personas pueden expresar su realidad»
El obispo agustino recoleto de Bragança, Jesús María Cizaurre, asegura que este Sínodo venía pidiéndose por parte de los obispos desde hace mucho tiempo. «El Papa siente la necesidad de repensar la evangelización en la Amazonia ante el momento actual de devastación», dice. Mons. Cizaurre sitúa las dos prioridades del Sínodo: la ecología integral y la evangelización. «No hay dudas de que tenemos dificultades en ambas cosas», asegura.
La escucha ha sido fundamental en el proceso pre-sinodal: «El Sínodo ha sido pensado para que al menos todas las personas de la Amazonia puedan expresar su realidad». El obispo agustino recoleto confía en que «el Espíritu Santo» mueva a los sinodales en sus decisiones.
«Estamos viviendo unos tiempos de cambios que nos exigen nuevos caminos»
La respuesta de la Iglesia en la Amazonia debe cambiar con este Sínodo, según explica el obispo agustino recoleto de Chachapoyas (Perú), Mons. Emiliano Cisneros. Para él es el punto importante de esta Asamblea. Respecto a la ecología integral, afirma que se trata de una urgencia «por los ataques que se realizan a la casa común», así como los ataques «a la especie humana», que son los afectados del cambio climático.
Mons. Cisneros afirma que el Sínodo ayudará a atender las periferias, por un lado las «geográficas, que tal vez sean las más fáciles de atender» y las «existenciales de tantas personas». Ante los momentos de cambio que vivimos, dice que es necesario «replantearnos muchas cosas».
«No se puede evangelizar sin antes humanizar»
«Debemos encontrar nuevos caminos». El mensaje de Mons. Joaquín Pertíñez, obispo agustino recoleto de Rio Branco, es directo. Solo ve una dificultad: «Si es panamazónico, encontrar caminos para los nueves países es el gran desafío».
Para la evangelización, Mons. Pertíñez ve necesaria primero la educación: «No se puede evangelizar sin antes humanizar». Sin tener los principios humanos, es difícil «colocar principios evangélicos» y «mucha de nuestra gente no tiene formación». Haciendo suyas las palabras del Papa, dice: «No podemos perder la Amazonia».
«Amazonas, tú eres el pulmón del mundo»
Mons. Héctor Javier Pizarro, obispo agustino recoleto del Vicariato de Trinidad (Colombia), cree necesario «saludar con gozo» la invitación del Papa Francisco para que «el mundo entero comprenda la grandeza que tiene el bioma amazónico para la humanidad». Castaño se fija en el aspecto ecológico del Sínodo. Su reflexión se centra en la sobreexplotación que se ha realizado sobre los recursos naturales del Amazonas. A modo de alegato, dice: «Amazonas, tú eres el pulmón del mundo, nos comprometemos contigo»