El segundo encuentro de la Escuela de Formación ‘In Imum Cordis’ ha concluido con el sentimiento generalizado de la revitalización en la formación de los Agustinos Recoletos.
Tras dos semanas de convivencia y aprendizaje, el pasado sábado 22 de febrero concluyó la segunda edición de la Escuela de Formación de los Agustinos Recoletos ‘In Imum Cordis’. En la última jornada, sus participantes hicieron evaluación y alcanzaron a una conclusión compartida por la gran mayoría: este proceso forma parte de la revitalización del carisma agustino recoleto. La Escuela de Formación, organizada por el Secretariado general de Formación, está ayudando a renovar a los propios formadores, ayudándoles sobre todo a detectar en su entorno problemas que no conocían. Esto, de forma indirecta, beneficia también a los formando.
El encuentro, que ha tenido lugar en Roma, ha continuado la línea que comenzó a trazar el primer encuentro el pasado año. Los 30 religiosos formadores de las distintas etapas han seguido profundizando hacia lo profundo del corazón, aprendiendo acerca de diferentes cuestiones relacionadas con el proceso formativo y el acompañamiento.
El encuentro ha girado en torno a cuatro temas principales. En primer lugar, sobre el acompañamiento personal. En este sentido, los participantes han aprendido técnicas de counselling y practicado sobre cómo acompañar a las personas que se acercan a ellos. Sobre esto habló a los presentes José Carlos Bermejo.
La familia de origen fue otro de los bloques relevantes. Los religiosos reflexionaron sobre la importancia que tienen las familias en el desarrollo de la vocación. Y es que, como explicaron las psicólogas María Jesús Boticario y Cristina Pérez, el padre y la madre del religioso pueden afectar a la vida comunitaria, a la formación… De este asunto se llevaron una tarea: que los formadores trabajen su propia familia.
El Prior general trató el tercero de los temas principales: el carisma agustino recoleto en la formación. Miguel Miró habló sobre la interioridad y el servicio de los Agustinos Recoletos a la Iglesia. Fue una jornada de reflexión, participativa y positiva.
La prevención de abusos fue la última de las áreas. Esta recayó sobre Daniel Portillo, sacerdote y miembro de la Comisión de Protección del Menor de la Orden de Agustinos Recoletos. Fue objeto de reflexión las relaciones de poder que pueden existir entre los formadores y los formandos, y cómo esto puede derivar en situaciones de abuso de poder o sexuales.
Los formadores agustinos recoletos tuvieron además la oportunidad de charlar con Mons. José Rodríguez Carballo, Arzobispo Secretario de la CIVCSVA. El obispo responsable de la vida religiosa en la Santa Sede comentó temas básicos. Fue una charla amable en la que los religiosos pudieron preguntarle diferentes cuestiones. A todos les animó a cuidar diferentes aspectos de la formación para la vida religiosa. Estuvo presente en la tertulia el Prior general.
La Escuela de Formación ‘In Imum Cordis’ no concluye con este encuentro. Los formadores seguirán trabajando durante todo el año los asuntos tratados en esta segunda edición. Y es que esta escuela no se limita a un encuentro, sigue que se mantiene trabajando durante todo el año. Todo ello para encauzar el tercer encuentro, que tendrá lugar el próximo año.