La Pascua no es un tiempo más para los jóvenes; es un motivo de felicidad y alegría, que llena de vida una juventud aburrida y desanimada.
“Vive Cristo, esperanza nuestra, y Él es la más hermosa juventud de este mundo. Todo lo que Él toca se vuelve joven, se hace nuevo, se llena de vida”. En las primeras palabras de la exhortación apostólica ‘Christus Vivit’, el Papa Francisco alega la perpetua juventud de Cristo resucitado, motivo de alegría para cualquier persona pero en especial para los jóvenes. En ellos está Cristo; sus sonrisas personifican la resurrección de Dios. Por eso, el Santo Padre exhorta a todos: “¡Él vive y te quiere vivo!”.
Para el joven cristiano, la Pascua supone uno de los momentos clave de su vida. La resurrección de Jesús explica que la juventud nunca se pasa de moda porque es imperecedera y perenne. Todo cristiano es joven al resucitar Cristo y regalar una vida nueva. Para muchos de estos jóvenes, la Pascua es una oportunidad de encontrarse con Dios junto a otros jóvenes. Es el caso de Andrea Arredondo, miembro de JAR México, y Freddy Rivero, también parte de JAR Venezuela. Este año tuvieron la oportunidad de participar en encuentros juveniles de Pascua y ahí han descubierto que verdaderamente Cristo vive. “Fue sorprendente vivir cada momento en que Jesús pasó a nuestro lado”, dice el segundo.
«Jesús nos da la oportunidad de resucitar»
Para ellos, esto no es un acontecimiento de fe sino un motivo de vida. Andrea asegura que “a través de la Resurrección veo el gran amor que Dios nos tiene”. Cuando Freddy está débil en la fe, le da esperanza “recordar su promesa de la resurrección”. Verdaderamente es un regalo, como lo ve Andrea. “Jesús nos da la oportunidad de resucitar a nosotros también”, dice. Freddy lo resume de la mejor manera: “Que Cristo haya resucitado es una de las cosas que llena de alegría mi vida”.
Esa alegría no es personalista, sino que se contagia. Aunque Andrea admite que es muy complicado, “una buena forma es empatizando con el mundo, con nuestros buenos actos y compartiendo el amor de Cristo”.
Freddy Rivero es músico y canta para todos los públicos, además de en su grupo parroquial. Por eso, el pide ser “un instrumento para que la Palabra llegue por medio de la música a los corazones de los jóvenes que lo necesitan y avive la fe y las ganas de seguirlo”. Jóvenes que “tienen mucho potencial pero que no tienen inspiración”, como dice Andrea.
«Cristo es contemporáneo»
Y es que seguirle es atractivo para los jóvenes porque Cristo es joven. Para la joven mexicana, Jesús es un joven más, “comprensible y lleno de un amor que se nos manifiesta e interpretamos según nuestra propia vida”. De la misma forma, para Freddy es su amigo, su hermano, su padre… Cuando él crece, Dios crece. “Cristo es contemporáneo”.
“Es muy importante contemplar al Jesús joven que nos muestran los evangelios, porque Él fue verdaderamente uno de ustedes, y en Él se pueden reconocer muchas notas de los corazones jóvenes”, dice el Papa Francisco Christus Vivit. Son muchas las notas que se pueden reconocer en el joven cristiano. En primer lugar, la esperanza, como apunta Andrea. “Deben ser jóvenes de buenos sentimientos, con mucha felicidad y renovados, porque Cristo ha resucitado”.
“Los jóvenes cristianos somos divertidos, creativos… La felicitad está siempre en esas cosas”. Es la felicidad de Jesús resucitado, que renueva y rejuvenece. “Jesús, lleno de vida, quiere ayudarte para que ser joven valga la pena”, dice el Papa Francisco.