La semana comenzaba con la comunidad de Avante, en la Parroquia Cristo Crucificado. Una comunidad muy entusiasta recibió al Prior general, y después de la celebración de la Eucaristía, se llevó a cabo el encuentro en el que se dialogó con las fuerzas vivas de la Parroquia, finalizando con un momento de convivencia fraterna.
El martes y miércoles la visita se trasladó a Cuernavaca. En esta ciudad, los agustinos recoletos atienden la parroquia Nuestra Señora de Guadalupe y Santa Rita de Casia, además de tres capillas: Santa Mónica, Sagrada Familia y Sagrado Corazón. Al finalizar la misa vespertina, el Prior general se reunió con los representantes de las diversas pastorales.
El miércoles se vivió un hermoso encuentro fraterno. Los religiosos acostumbran compartir el día en la finca que la Vicaría de México posee en Cuernavaca, donde celebraron en comunidad los cumpleaños de algunos religiosos. Sin duda, fue un momento de fraternidad que llenó los corazones y aportó un matiz especial a la vida religiosa.
El jueves, de regreso a la Ciudad de México, el P. Miguel Ángel visitó la comunidad de Santa Mónica. Al igual que en las anteriores visitas, se celebró la Eucaristía, en esta ocasión con motivo de la fiesta de Santo Tomás de Villanueva, seguida de una enriquecedora charla con los representantes pastorales.
El viernes se retornó a la ciudad de Querétaro para una visita fraterna a la comunidad de Lomas de Casablanca. Esta parroquia, dedicada al Divino Redentor, destaca por su sólida organización pastoral y su gran dinamismo. El Prior general se reunió con el consejo pastoral parroquial, intercambiando opiniones y se interesó por el trabajo que realizan los frailes recoletos en la comunidad.
El sábado fue un día de gran celebración, ya que el Prior general recibió la profesión solemne de Fr. José Antonio Hernández. La ceremonia tuvo lugar en el auditorio del Colegio Fray Luis de León y fue presidida por Mons. Javier Acero, agustino recoleto y obispo auxiliar de la Ciudad de México. La celebración eucarística fue un momento profundamente cálido, donde se vivió y vibró intensamente a la luz de nuestro carisma.
Durante la semana, el Prior general también se reunión con el consejo de la Vicaría de México y Costa Rica, una oportunidad para analizar la situación actual de las comunidades de esta demarcación, planteándooslo los retos, dificultades y esperanzas.