Donde hay un hijo, siempre hay una madre que lo acompaña y cuida. En el hogar, los hijos aprenden los valores fundamentales que configuran su personalidad, y es la relación materno-filial la que los acerca particularmente a la vida cristiana.
Las madres siempre han acudido al testimonio de personas ejemplares para guiar a sus hijos por el camino del bien. A lo largo de la historia, la figura de Santa Mónica de Tagaste, madre del inquieto San Agustín, se presenta como el modelo de madre que ora por el bienestar y la fe de sus hijos.
Su biografía, enaltecida por la pluma de su hijo, es un referente de constancia y paciencia en el esfuerzo por engendrar a los hijos para Dios: «Crió a sus hijos dándolos a luz tantas veces cuantas los veía apartarse de Ti» (Conf. 9, 22).
El nacimiento de Madres Cristianas Santa Mónica
La Familia Agustino-Recoleta ha tenido la sensibilidad y el compromiso de acompañar a las familias cristianas en la educación de sus hijos. Tal es el caso del religioso agustino recoleto Lorenzo Infante (+1997), quien, en los años ochenta, acogió la súplica de un grupo de madres preocupadas por el paulatino alejamiento de sus hijos de la práctica religiosa.
Con creatividad y arrojo, promovió una cadena de oración continua por los hijos, formando coros de siete madres, a quienes se les asignó la encomienda de orar un día a la semana por los hijos de todo el grupo. Así nació la Asociación laical «Madres Cristianas Santa Mónica» en la parroquia Santa Rita de Madrid, atendida por los agustinos recoletos.
Expansión y crecimiento
Esta iniciativa fue calando progresivamente en diversos ministerios de España y más allá de sus fronteras, tanto en Europa como en América.
Su simple estructura ha favorecido la proliferación de los coros de Madres Mónicas. Ha sido suficiente que un grupo de siete o más madres se pongan de acuerdo para formar un coro de oración por los hijos de todas, siguiendo unas oraciones breves y reuniéndose un día en torno al 27 de cada mes, en la medida de lo posible.
No han faltado los religiosos que, con celo pastoral, han acompañado a los coros de Madres Mónicas, facilitándoles las oraciones «oficiales» y acompañándolas con otras plegarias con las que toda madre alimenta la vida de fe de la familia.
Incluso se han publicado sencillos manuales o instructivos para guiar la constitución de estos coros.
El 56.º Capítulo General de los Agustinos Recoletos, celebrado en octubre de 2022, acogió con alegría la propuesta de los religiosos que solicitaban mayor atención para las Madres Mónicas.
El Capítulo se propuso «promover y acompañar la devoción de los grupos de Madres Cristianas Santa Mónica en nuestros ministerios» (D. 3).
Un año después, en junio de 2023, el Consejo General constituyó un equipo para atenderlas, con las siguientes encomiendas:
1️⃣ Realizar un levantamiento de los grupos existentes, tanto en los ministerios de la Orden como fuera de ellos.
2️⃣ Conocer la realidad de los mismos y su funcionamiento.
3️⃣ Poner en contacto a los distintos grupos para facilitar su organización.
4️⃣ Identificar sus demandas, expectativas y deseos en relación con la Orden.
5️⃣ Discernir qué es lo que el Señor nos pide en estos momentos de la historia, para no poner obstáculos a la acción del Espíritu Santo.
Un camino de acompañamiento
Los miembros del equipo han asumido con dedicación la encomienda del Consejo General. Lo primero ha sido entrar en contacto, de forma presencial o virtual, con las coordinadoras de los coros de Madres Mónicas, haciéndose eco de la voluntad de la Orden de acompañarlas y promoverlas.
Han constatado la fuerza y compromiso de las Madres Mónicas, tanto en ministerios atendidos por agustinos recoletos como en aquellos donde no hay presencia de la Orden. Un simple gesto de atención ha sido suficiente para reactivar algunos coros que habían sido desatendidos y para que surgieran nuevos grupos de oración en diversos ministerios.
Por otra parte, el equipo se ha empeñado en la elaboración de orientaciones para el adecuado acompañamiento de esta asociación laical, así como en la creación de un folleto de oraciones para distintas circunstancias en las que las madres presentan a sus hijos al Señor.
Entre las demandas que nos hacen está la inquietud de recibir formación, como materiales afines a santa Mónica, a la espiritualidad agustiniana o al magisterio de la Iglesia, que puedan utilizar en sus reuniones, ya sea en formato de audio o video. Es muy significativo el reclamo de ser iniciadas en la oración; no se conforman con recitar algunas plegarias.
Es tal la necesidad y el atractivo para las madres de la oración por sus hijos, que basta con conocer la existencia de un espacio o grupo de apoyo para que nazcan nuevos coros de oración continua.
*Artículo escrito por Fr. Sergio Sánchez, para el Anuario 2024.