La fama de santidad de que gozó la madre Antonia durante su vida y, sobre todo, después de su muerte no fue provocada por la propaganda, sino por sus virtudes. Cuando en 1827 se descubrieron sus restos mortales incorruptos y cincuenta años después se hallaron en el mismo estado, creció la fama de santidad y crecieron las ansias de iniciar la Causa.
Año de documento: 2008.
Autor: OAR
España