El coste de reparación de las filtraciones asciende a unos cien mil pesos (algo más de 5.200 euros), y aunque aún no han presupuestado los pisos nuevos, esperan que de las ventas se puedan conseguir esos recursos también, dijo Imelda Baca, una de las organizadoras del evento.
Algunos de los asistentes fueron invitados por correo electrónico y otros al asistir a la iglesia, sin embargo, llegó más gente de la esperada. «En primer lugar la convocatoria para que vinieran los vendedores fue muy buena. Sobrepasó las expectativas de lo que teníamos, porque esperábamos algo más pequeño», dijo Baca.
ARTÍCULOS MUY VARIOPINTOS
Bajo carpas, sobre los pasillos del templo y desde la entrada, 35 mesas dispusieron productos que variaron entre ropa, joyería, libros, artículos religiosos, plantas, velas aromáticas y hasta alcoholímetros portátiles. «Les gusta mucho la comida, a otros los juguetes para los niños, regalos para las personas con eventos a finales de diciembre», dijo la encargada del evento sobre los consumos más populares.