El Colegio Nuestra Señora de la Consolación ha sido galardonado con la Granada de Plata en la entrega de los Premios de la Ciudad de Granada. El acto tuvo lugar en el Teatro Isabel La Católica de la capital andaluza. Las Misioneras Agustinas Recoletas (MAR), encargadas de este centro educativo, recogieron el galardón que coincidía con sus 50 años dedicados a la enseñanza en La Chana, según cuenta el ex alumno y periodista Antonio Sánchez, en la crónica publicada en “El Ideal”.
“Las Monjas”, como se conoce cariñosamente en el barrio este centro educativo, nació de forma modesta en los años 60, del seno de una congregación misionera que comenzaba su andadura y trabajaba con el deseo de atender a la niñez necesitada de promoción integral.
El sueño de la madre Carmela Ruiz comenzó a tomar forma con poco más de 100.000 pesetas, en un modesto local ubicado en el bloque 41 de la barriada de las Angustias. Fue el origen de un proyecto educativo que arrancaría en 1962 y que se trasladaría en 1967 a una manzana próxima donde actualmente se encuentra el Colegio Nuestra Señora de la Consolación.
Pureza, amor y ciencia
De esta manera, lo que comenzó en el bajo de un bloque de pisos se trasladó a un espacio más amplio, adecuado a las diferentes leyes de educación y actualizado hoy al siglo XXI. Esto permitió a las MAR educar en los ideales de pureza, amor y ciencia.
Así, sus valores educativos han consolidado al Colegio Nuestra Señora de la Consolación como uno de los referentes educativos en La Chana. Según señala la institución en su libro conmemorativo del 50 aniversario, su tarea se fundamenta en «educar en la interioridad, la verdad y la libertad responsable para aprender a ser», así como «educar en la amistad, la comunidad, la justicia y la solidaridad, para aprender a amar y compartir».
Miles de ex alumnos viven ahora en una sociedad cambiante y complicada con unos principios sólidos adquiridos durante su paso por el colegio. Cada uno de ellos lleva en sí una parte de las MAR.