Desde el 15 de septiembre de 2024, el Prior general, Fr. Miguel Ángel Hernández, está visitando las comunidades religiosas de México, en el marco de su gira pastoral por América del Norte, y que durará hasta mediados del mes de noviembre. Como él mismo explicó antes de comenzar el viaje, esta visita tiene como objetivo conocer de cerca la realidad de las comunidades agustinas recoletas, tanto de religiosos como de laicos, así como los desafíos y proyectos que enfrentan en su misión pastoral.
El día de su llegada coincidió con la celebración del Grito de Independencia, una de las festividades más importantes de México, que conmemora el llamado a la lucha por la independencia del país en 1810. Esa noche, Fr. Miguel Ángel se unió a las celebraciones en el Postulantado San Agustín, conocido popularmente como El Hueso -porque es el nombre de la calle donde está situada-, una casa de formación ubicada en el sur de la Ciudad de México, en la colonia Jardines del Pedregal. En este lugar, los jóvenes que se preparan para ingresar a la Orden viven su primera etapa de formación.
Al día siguiente, el 16 de septiembre, en la Ciudad de México, Fr. Miguel Ángel se reunió con los frailes encargados de las parroquias de Lourdes y Częstochowa, y hablaron sobre los desafíos y oportunidades pastorales para las comunidades. Por la tarde, el Prior se reunió con los grupos laicos y de la Fraternidad Seglar, y durante la conversación subrayó la importancia del trabajo en conjunto para el crecimiento espiritual y apostólico.
El 18 de septiembre, Fr. Miguel Ángel presidió la Eucaristía de apertura de la VII Asamblea Federal de Monjas Agustinas Recoletas de México en Puebla, donde destacó la importancia de la confianza en Dios en tiempos de incertidumbre: Es normal que el miedo nos asalte, que la incertidumbre toque a nuestra puerta; miedo porque parece que somos pocas, miedo porque envejecemos o porque no vemos claro el camino. Pero esos miedos nunca pueden hablar más fuerte que nuestra confianza en el Señor. Él está con nosotras siempre. Durante la homilía, también hizo un llamado a la comunidad a ser valiente y a no resistir al Espíritu Santo: Atrévanse a romper con los esquemas de siempre. Dios hace nuevas todas las cosas cada día.
“Esos miedos nunca pueden hablar más fuerte que nuestra confianza en el Señor. Él está con nosotras siempre (…) Atrévanse a romper con los esquemas de siempre. Dios hace nuevas todas las cosas cada día”
Además, subrayó la necesidad de ser humildes y estar abiertas al diálogo, y recordó que la Asamblea es un espacio para discernir juntas lo mejor para la Orden y dejar de lado los intereses personales: No estamos aquí para defender nada. No es un campeonato de ideas, sino un acto de fe en el que todas queremos escuchar la Voz de Dios y trabajar por el bien común de la Federación y de la Orden.
A lo largo de la semana, Fr. Miguel Ángel también visitó diversas comunidades de monjas en Tlaxcala y Cuauhtinchan, y compartió distintos momentos de diálogo y oración con ellas. El jueves 19, en la jornada en el Postulantado San Agustín celebraron la festividad de San Alonso de Orozco, y fue una oportunidad par reflexionar sobre cómo la vida comunitaria es un pilar fundamental de la espiritualidad agustiniana.
Para cerrar esta primera semana, el viernes Fr. Miguel Ángel se reunió con la comunidad de formación y los postulantes, que compartieron con él sus inquietudes y experiencias y, el sábado se profundizó sobre el papel de los laicos en la Iglesia con los miembros de la Fraternidad Seglar.
Este recorrido, que inició en Tecamachalco, seguirá por otras ciudades mexicanas, como Chihuahua, Querétaro y Puebla, con el objetivo de seguir conociendo y acompañando a las comunidades religiosas y laicas del país antes de continuar su gira hacia Estados Unidos en noviembre.