Las Juventudes Agustino Recoletas (JAR) siguen potenciando y difundiendo el carisma agustiniano entre los jóvenes de todo el mundo. La última actividad que han organizado ha sido la Cumbre Regional de Jóvenes Agustinos Recoletos de Visayas-Mindanao 2025 (RRAYS), celebrada del 10 al 12 de enero en la Universidad de San José-Recoletos (USJ-R) en Balamban, Filipinas.
Inspirados en la Fiesta del Santo Niño y guiados por el lema «También ustedes son mis testigos, porque han estado conmigo» (Juan 15:27), 216 delegados de Mindanao, Negros y Cebú se han reunido para reafirmar su compromiso con la oración, la comunidad y el celo misionero, valores fundamentales del carisma agustino recoleto.
Primer día: «Testigos firmes de Cristo»
La cumbre comenzó con una solemne celebración eucarística, presidida por Fr. Leander Barrot, OAR, de la Sección de Espiritualidad y Formación Permanente que inauguró las jornadas. A continuación tuvo lugar la primera charla, que fue impartida por Fr. Gideon Antolin Lagrimas, OAR.
Fr. Gideon profundizó en el lema elegido para la Cumbre e invitó a todos los participantes a ser “testigos firmes de Cristo en sus vidas”. Además, animó a los delegados JAR a “abrazar su papel como portadores de fe, unidad y esperanza dentro de sus comunidades”.
El primer día concluyó con uno de los momentos más esperados: la ‘Fiesta del Barrio’, una celebración de la diversidad y la unidad cultural que sirve para reflejar la riqueza del movimiento RAY a nivel global. A través de bailes, presentaciones y manifestaciones artísticas, los participantes compartieron las tradiciones de sus ciudades natales, en un testimonio de la multiculturalidad presente dentro de la Orden.
Segundo día: «Amor y compasión»
El segundo día se centró en la charla ‘Peregrinos de esperanza’, impartida por Kenneth S. Parra, RN, LPT, colaborador laico de RAY de Talisay. En su mensaje destacó el papel de los jóvenes como agentes de cambio: “Jóvenes como peregrinos llenos de esperanza, que viajan hacia el reino de Dios y difunden su mensaje de amor y compasión. Una vocación que trasciende fronteras y que es compartida por miles de jóvenes agustinos recoletos en todo el mundo”.
La peregrinación a la Basílica Menor del Santo Niño de Cebú fue otro de los momentos destacados del evento. En un ambiente de oración y reflexión, los delegados renovaron su compromiso con la humildad y la confianza en Dios. Sobre todo, como explican los propios jóvenes, profundizaron en su conexión con el Santo Niño y con el ideal agustiniano de buscar y proclamar el reino de Dios.
Tercer día: «Escuchar y responder con generosidad»
El último día estuvo dedicado al discernimiento vocacional. Fr. Paul Demillones, OAR, Promotor Nacional de Vocaciones, compartió una inspiradora charla sobre la importancia de escuchar el llamado de Dios y responder con generosidad. Sus palabras instaron a los jóvenes a aceptar sus roles únicos en la Iglesia, ya sea como colaboradores laicos, religiosos o servidores dentro de sus comunidades.
Uno de los momentos más emocionantes fue la incorporación de 21 nuevos miembros al movimiento RAY durante la celebración eucarística presidida por Fr. Joseph Dexter Palagtiosa, OAR, Asesor Espiritual Provincial de RAY. A partir de ese momento, estos jóvenes fueron incorporados como miembros de pleno derecho del movimiento RAY.
Este encuentro en Filipinas es solo un ejemplo de la vitalidad del movimiento de Juventudes Agustino Recoletas a nivel mundial. Desde América Latina hasta Europa y África, las JAR siguen creciendo como una comunidad global de jóvenes que, con «un solo corazón y una sola alma en el camino hacia Dios», trabajan por un mundo más justo, solidario y arraigado en los valores del Evangelio al estilo de san Agustín.