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«La convivencia entre musulmanes, católicos y cristianos enriquece la espiritualidad»

Fr. Jess Marco Sanchez, prior de la comunidad agustina recoleta de Kamalo en Sierra Leona, comparte en esta entrevista sus experiencias, desafíos y sueños en su labor de evangelización, educación y diálogo interreligioso. Originario de la isla de Negros en Filipinas, llegó a Sierra Leona en 2015 durante la crisis del ébola.

Como prior y gestor escolar, Fr. Jess es responsable de la administración de 48 escuelas pertenecientes a la diócesis de Makeni y ha explicado que el principal desafío al que se enfrentan es la consistencia: Cuando intentas convencer a alguien con amor, no basta con decirlo una vez o mostrarlo en un solo incidente. Debe haber una demostración constante de amor para que el mensaje sea recibido. 

Y para explicar este reto ha utilizado la analogía del amor familiar: Nadie sabe que nuestros padres son nuestros verdaderos padres al nacer, pero su amor constante durante los buenos y malos momentos nos convence de que realmente lo son. De igual manera, en la proclamación del Evangelio, la consistencia es clave. Siempre rezamos a Dios para que nos otorgue perseverancia y determinación para ser consistentes en nuestro trabajo de evangelización.

La interacción entre musulmanes, católicos, cristianos y otras denominaciones religiosas en Sierra Leona ha sido profundamente enriquecedora para el Padre Jess: A través de la experiencia de vivir con ellos, descubrimos que la presencia de Dios y del Espíritu Santo no se limita a los confines del catolicismo. Antes de nuestra llegada, Dios ya estaba aquí; el amor ya existía. Esta experiencia nos enriquece y nos impulsa a ser consistentes en nuestra proclamación y evangelización.

Fr. Jess tiene grandes sueños para su misión como animar a otros religiosos y voluntarios a venir aquí, a ampliar sus perspectivas y a ser valientes. Quiero romper la mentalidad de que al venir aquí somos nosotros los que ayudamos. Al permanecer aquí, descubrirás que no solo ayudas, sino que también eres enriquecido. Ellos te ayudan a conocer más sobre tu propia religión y sobre ti mismo.

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